¡Buenas!
Tras aventurarnos en una Cataluña postapocaliptica, el mundo de Necromunda, y una nave espacial desconocida, ahora ha tocado que el grupo de juego DBArcelona decida batallar en el.mubdonde Warhammer. Concretamente como enanos de Karak 8 picos.
Los descerebrados valientes jugadores Prich, Redentroll y Duco se han adentrado en las profundidades de la fortaleza enana para recuperar un martillo rúnico.
La aventura ha sido editada para quitarle algunas las coñas internas y hacerla más seria de lo que fue en algunos puntos, ya que creo que el universo lo merece. Como nota, no he editado los nombres de los PJ, aunque mis partidas de rol tienden a ser una mezcla de Mortadelo con Asterix en lo que a nombres de PJ y PNJ se refiere gracias a la intervención estelar d ellos jugadores. Eldelbar, o Venéreas son nombres comunes de elfo, por ejemplo, mientras que hay personajes llamados Jamilgo o La Yoli (contacto hacker de shadowrun) en varias partidas. All hail the players.
Sin más tema, os cuelgo la primera aventura en karak 8 picos.
LA TUMBA DE RAGNAR ERIKSON
El Runesmith Xaviborg Elmotson (lo que os decía de los nombres…) llamó a la aprendiz de herrera Hannah Olafsdottir para proponerle una misión. Esa misión largamente esperada era la que le haría poder empezar a estudiar Runas de Poder, entrando a formar parte de los herreros rúnicos propiamente dicho. La misión: traer de vuelta el martillo rúnico de Ragnar Erikson, un antiguo herrero rúnico de Karak 8 picos.
Elmotson pidió a 2 de sus mejores amigos, los “rednecks” atronadores Gunnar & Roseborg Manolosson que acompañaran a Hannah y su hermano Olaf Olafson X (un poco limitado intelectualmente, él) en la misión. Los compañeros de borracheras del viejo runesmith de Karak Azgal (y único poseedor de un yunque rúnico de karak 8 picos) lo celebraron tomando unas pintas en su nombre.
El grupo partió con una mula apodada “Betsy” hacia las profundidades de Karak 8 picos. Peor primero pasaron por la sala de exploradores. Esta imponente sala (aunque pequeña para los estándares enanos) adjunta al Gran salón es la salida de la ciudadela hacia las profundidades. Su puerta grabada con runas está asegurada con una barra de gromril también rúnica, y la sala se halla cubierta por cañones y lanzavirotes desde posiciones elevadas y aspilleras en sus muros.
Al abrirse la puerta los 4 enanos y su mula salieron hacia esta sala junto con media docena más de enanos. De vuelta entraron otra docena, 3 de ellos siendo portados por sus compañeros (2 de ellos tapados, con claros símbolos de que se habían ido a reunir con los Ancestros) y todos con cara de cansados. La sala se hallaba protegida por rompehierros y ballesteros y contaba con un pequeño pero activo centro de comercio.
Tras esperar su turno, el grupo se dirigió a la mesa de la sargento de la sala, Kontact Arrenson “la Predator”. Una enana no llega a una posición de mando de martilladores fácilmente, y menos en una comunidad tan marcial como karak 8 picos. Su apodo era más que merecido. Al ver al grupo y escuchar su objetivo, la veterana llamó a 2 rompehierros para que escoltaran al grupo: Los hermanos Lokiheim y Thorheim Grimnisson. La pareja tenia pocas más luces que el bueno de Olaf, peor conocían bien los túneles y peligros de las profundidades de Karak 8 picos.
Tras descender hasta la carretera subterránea, el grupo se encontró con los marilladores de la zona, que les indicaron los 2 caminos posibles para acceder a las salas a las que se dirigían, bastante más profundas que la carretera subterránea. Uno era un camino más largo, de dura y confiable manufactura enana, pero que podía tener peligros tras algunos seísmos menores y la falta de mantenimiento, ya que un río había sido desviado originalmente para hacer parte del recorrido. La otra era más directa, pero implicaba usar la mierda de túneles que hacen los goblins y skavens (escupitjo al suelo al hablar de eso) en parte del recorrido.
Como buenos aventureros, el grupo eligió atravesar los túneles goblins. Tras un rato de usar buenos y sólidos túneles y salas enanos sen adentraron en túneles hechos de cualquier manera por los pielesverde. Unos túneles con ángulos de ataque inadecuados, con mampostería cutre (si eso), húmedos y maloliente. Los túneles bajaban de manera bastante empinada y tuvieron algún resbalón, peor en general avanzaron bien. Hasta que, como buenos túneles goblin, se dieron de bruces con un grupo de goblins tras fallar SEIS tiradas de percepción a 8+ con un +2 a la tirada. La partida goblin contaba con garrapatos. El enfrentamiento les fue mal (es el túnel, que está mal hecho…) y tuvieron que recular, cosa que sólo consiguieron gracias a que Olaf Olafson X se auto-inmoló para salvar a su hermana, lanzándose contra los pielesverde cual matador, y eliminado a un garrapato, pero las puntas oxidadas de 20 lanzas goblins lo acribillaron y ni su grueso pellejo enano pudieron salvarlo. Betsie la mula también fue abandonada en la huida, quedando el grupo escaso de suministros.
Tras reponerse y volver sobre sus pasos encontraron a Olaf aún vivo (!!!), pero por poco. Lo dejaron allí, protegido por una runa de ocultación y prometiendo volver por él cuando la cosa se acabara.
Siguieron avanzando sin más altercados (benditas tiradas superadas de percepción) hasta unas antiguas forjas enanas, ahora silenciosas. En una de las salas adyacentes, las runas enanas de las armaduras de los rompehierros les permitieron detectar la puerta oculta que marcaba la entrada a la tumba. Hallaron la combinación necesaria para abrirla usando un arma de factura enana en su cierre, y entraron en la tumba de Erikson.
La tumba era una sala de unos 15 metros de largo por 10 de ancho. Se iluminó cuando el grupo de 5 enanos entró con 2 braseros rúnicos en lo alto de las paredes. Lo primero que vieron fueron las 4 grandes estatuas de guerreros enanos en las esquinas, el gran sarcófago en el centro y el agujero abierto en una
de las paredes por el que habían entrado los skavens ahora esparcidos a docenas muertos por el suelo. Tras mirarlos un poco, los skavens llevaban tiempo muertos, y habían sido machacados más que cortados, como a grandes y poderosos golpes. Contaron unos 40 skavens muertos. Tras mirar las estatuas vieron que estaban articuladas. Una de ellas tenía algunos arañazos y marcas secas de sangre skaven en su parte inferior y extremidades. Todas tenían runas en su cabeza y pecho. “Guardianes” dijo Hannah tras examinarlas. “Una antigua arma enana. Pocos pueden fabricarlos ya. Erikson era diestro!”.
Al acercarse al sarcófago grabado con un enano yaciendo encima, se iluminaron varias runas alrededor del mismo. Además del nombre del antiguo herrero rúnico, algunas runas empezaron a flotar alrededor del sarcófago. Números enanos. Números con significados rúnicos: Valaya, Grimnir, Grungi, 42, Sombreros, Herrería, martillo, cerveza, vuelo, fuego y destrucción.
Los enanos debatieron largamente qué debían hacer hasta que empezaron a probar combinaciones que les parecían factibles. Tras la primera combinación (un poco al un tun) las runas de los guardianes de piedra se iluminaron. ´Los personajes empezaron a correr como pollos sin cabeza hasta que no pasó nada. Con la segunda combinación (más pensada) el sarcófago vibró y empezó a ascender hacia el techo, donde se abrió una abertura. Debajo del sarcófago ascendido había aparecido una escalera, que los enanos usaron para ascender. Allí, en una sala más pequeña, encontraron un sarcófago más sencillo. Dentro, el cadáver momificado de Erikson les esperaba. Con respeto quitaron el martillo que sostenía y un brazal de gromril. El martillo estaba grabado con runas incandescentes y de vuelo, mientras que el brazal permitía tener cierto control sobre los fuegos cercanos. Esto lo descubrieron más tarde.
Salieron, cerrando la tumba de nuevo tras ellos y se dispusieron a volver…. Por el camino que nadie recordaba. ¿Era ese túnel o era ese otro? Su decisión se vio forzada por la aparición de un troll de piedra. Tras entrar en un túnel pequeño vieron que el troll no podía seguirles ahí. Envalentonada, Hannah decidió darle un toque al troll para que supiera lo que era el poder enano: Le lanzó el martillo rúnico con la runa del vuelo… que quedó incrustado en el pecho del troll tras una tirada patética de ataque. El troll rugió de rabia, y también lo hicieron los 4 enanos hombre del grupo. Tocaba ahora enfrentarse al bicho. Aunque brutal, el combate acabó con sólo los rompehierros inconscientes y con un brazo roto. Tras recuperarse del mismo el grupo eligió uno de los túneles (tirada de orientación fallida) y volvieron hasta la carretera subterránea sin encontrar a Olaf en su recorrido!! La saga de os Olafson terminó como consecuencia en un sucio, húmedo y mal construido túnel goblin.
Elmotson admitió a Hannah entre sus aprendices, y se regó a los otros 4 valientes con muchas rondas de buena cerveza enana en la que contaron sus gestas (omitiendo mayormente el combate contra los goblins).
Y hasta ahí la primera sesión de karak 8 picos